La teoría del discurso establece
la definición de un discurso. En primer lugar, lo define como una realidad
material, argumentando que "en toda sociedad la producción del discurso
está a la vez controlada, seleccionada y redistribuida por un cierto número de
procedimientos que tienen por función conjurar los poderes y peligros, dominar
el acontecimiento aleatorio y esquivar su pesada y temible materialidad."
(Foucault: )
Michel Foucalt realiza una
crítica a todas las expresiones de poder, analizando y explicando cómo
funcionan estas para ejercer el poder sobre la sociedad. Además, establece cómo
se transforman los discursos en discursos políticos para lograr una dominación.
Esta dominación, según Foucault,
se puede transformar en un discurso panóptico, el cual afirma que no importa
dónde se encuentre, siempre te está observando el poder. Foucault lo
ejemplifica con el cuadro de Las meninas de Velázquez, en donde en segundo
plano se percibe una sombra, la cual representa el poder del rey, el cual
siempre está presente.
Establece los sistemas de
exclusión, los cuales son provocados externamente por la sociedad. Cabe
destacar que en una sociedad, la clase dominante siempre quiere permanecer en
el poder, sin embargo, hay otra clase que quiere acceder al poder. Los sistemas
son:
- · La palabra prohibida
- · La separación de la locura
- · La voluntad de verdad
Asimismo, plantea los procesos
internos que afectan al discurso: principios de clasificación, ordenación y
distribución. Primero habla del comentario, cualquier cosa que se diga del
discurso se verá afectado en su interpretación; el autor debe ser reconocido
para tener un panorama acerca de las intenciones del mismo, así como el
contexto en el que escribió cierto discurso. Por último, las disciplinas, que
deciden el tono del discurso, y depende de la voluntad de la verdad.
Dado que el discurso representa
diversos problemas, Foucault plantea cuatro principios que promueven la
solución de la problemática del discurso:
Principio de trastocamiento:
dónde se reconocía el origen del discurso (el autor, la disciplina, la voluntad
de verdad), hay que reconocer el enrarecimiento del discurso.
Principio de discontinuidad: el
que existan sistemas de enrarecimiento del discurso no implica que debajo de
ellos se encontrará un discurso ilimitado, continuo y silencioso. Los discursos
deben de ser tratados como prácticas discontinuas que se cruzan, yuxtaponen,
ignoran o excluyen.
Principio de especifidad: la
concepción del discurso como una violencia que hacemos a las cosas, donde los
acontecimientos del discurso encuentran su regularidad. Esto debido a que las
cosas no tienen regularidad per se. Nosotros se las imponemos.
Principio de exterioridad: a
partir del discurso, ir hacia sus condiciones externas de posibilidad, sus
motivos, y lo que fija sus límites.
La teoría establecida por
Foucault es una de las más importantes en el estudio de la comunicación de
masas, por lo que sus aportaciones referentes al discurso crean un parte aguas
en la manera de realizar uno, ya que se debe de tomar en cuenta todo lo que
implica para realizar uno de manera correcta.
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